Si tu uña se rompe ¿debes cortarla o limarla?

Todas hemos pasado por el beauty drama de una uña rota, ¿verdad? Y es allí cuando se plantea la duda sobre si es mejor cortar o limar, teniendo en cuenta que queremos que las uñas crezcan más sanas y fuertes.

Para muchas, lo habitual cuando se rompe una uña es cortar por lo sano, parece lo más lógico. Así que, con una mezcla de rabia y frustración procedemos a realizar el temido corte.

Lamentablemente, tengo que decir que cortar la uña rota es un error bastante gordo para tu manicura.

Aunque hacerlo así parezca la solución más rápida, debes tener claro que la rotura de uña hay que solucionarla limando. De lo contrario, tu uña será mucho más débil con tendencia a resquebrajarse, escamarse e, incluso a romperse nuevamente.

El procedimiento correcto es limar tu uña para sellar y protegerla de posibles agresiones. También debes tener en cuenta cuál es la mejor forma de limar las uñas. Para ello, procura siempre realizar movimientos en una única dirección para evitar que se astillen. Es igual de importante elegir el tipo de lima adecuado en función de tu uña. Si tu uña es débil y presenta descamación, mejor utiliza una lima de grano fino, de 250 en adelante, mientras que si tu uña está sana necesitarás una lima de grano 180, aproximadamente. Las limas más abrasivas (de 120 o menos) son aconsejables utilizarlas en uñas acrílicas o de gel.

En cuanto al material de la lima, también puede variar, pero las más recomendables son las de cartón, ya que las de vidrio pueden resultar desagradables para algunas personas.

Ahora que ya sabes cómo actuar ante una una uña rota, podrás optar por disfrutar de los beneficios de una manicura saludable.